domingo, 23 de octubre de 2011

LA DESPEDIDA

Nunca olvidará el día que la vio por ultima vez, fue  el 31 de agosto del 2005. Era de noche y la lluvia no cesaba, parecía  que hasta el cielo estaba tan triste como ella por el desconsolado acontecimiento.  Tomó las fuerzas necesarias para despedirse y  lentamente se acercó  a su morada. 
Lo primero que percibió  fue la palidez de su cansado y frío cuerpo, en su redondo y blanco rostro  se delineaban  abundantes surcos alrededor de sus ojos y boca, eran la prueba de su experiencia.  Sus cabellos de plata unidos por una trenza  le caían a un costado de su hombro izquierdo, tenía sus ojitos cerrados, parecía que estaba profundamente dormida. Tal parece que el aire de su fina nariz de repente dejo de salir. El único consuelo que ella tenía era; que en sus  gruesos y morados labios se formaba una leve sonrisa, que nos indicaba que se encontraba feliz de al fin poder descansar en el paraíso.


Descanse en paz, Ma. Dolores González
¡Siempre vivirás en mi corazón!.

1 comentario:

Mildred Villa dijo...

Hola Adriana, me gusta la manera en que empiezas llevando al lector a la descripción. Desde la primera oración, uno como lector nota a que punto o situación llevaras a describir a alguien.

Los adjetivos usados para describir a esta persona son muy buenos ya que eh formado una fotografía de dicha descripción en mi mente y agrego mas detalles a ella a como voy terminando el texto.
Sólo que en la parte de "tal parece que el aire de su fina nariz de repente dejo de salir", nose quizas un poquito mas profundo y detallado me hubiera llevado la fluidez de mi lectura hasta el fin. Sólo sentí un corte, que claro no fue de gran importancia pero es sólo un comentario!
Me gusto mucho, y se que hay sentimiento en tu descripción. Eso me agrada.

Sobre la ortografía la verdad la veo muy bien, mejor que la vez pasada. Me alegro de esto.

Cuídate mucho, mis mejores deseos

Mildred Villa.